viernes, 16 de septiembre de 2011

Leche de vaca, ¿buena o mala?



Nunca se han preguntado por qué el ser humano es el único animal que después de pasar su etapa de lactancia sigue tomando leche, y como si eso no fuese suficiente, toma leche de otra especie animal que tiene cuatro estómagos para digerirla y el humano solo tiene uno.

También el ser humano es el único animal que padece de osteoporosis y si se supone que la leche tiene mucho calcio y un perfecto equilibrio para que el calcio pueda ser digerido, ¿por qué muchos humanos padecemos de dicha enfermedad?

Muchos nutricionistas afirman que la leche de animal puede y debe ser sustituida por leches como la de soja, arroz, algas, etc.

La leche de vaca tiene mucha lactosa (azúcar de la leche), así sea entera o descremada. Gran cantidad de personas son altamente intolerantes a ésta sustancia y puede generar molestias alergias. Esto se debe por que el ser humano luego de la etapa de lactancia, va perdiendo la enzima lactasa que es la encargada de dividir la lactosa en glucosa y galactosa(ambas ayudan como generadores de energía para el organismo).

Se cree que a medida que pasan los años, en las regiones del mundo donde el consumo de lácteos es elevado, se muestra un incremento en la producción de lactasa durante la vida (igual todavía no estamos ni cerca de estar adaptados), esto puede deberse al proceso evolutivo natural.

Alternativas a leche de vaca
El calcio (factor principal por el cual se recomiendo la leche) puede ser ingerido desde otra diversa cantidad de alimentos principalmente aquellos de hojas verdes oscuras como el brócoli, espinaca, nabo, etc. y en algunos pescados como el salmón y las sardinas entre otros, aceites y chocolates amargos.
Si existen todos éstos argumentos contra la leche, ¿por qué no se ha iniciado una campaña para dejar consumirla?
Primero, porque no todos los nutricionistas están de acuerdo con ésta postura y afirman que la leche si es esencial y no debe eliminarse para así mantener una dieta equilibrada y sana.
Por otro lado pero no menos importante es el factor económico. Muchos países dependen en gran medida de la directa o indirectamente de la industria lechera que va desde  la comercialización de distintos tipo de leches, quesos, yogurts, etc.

Personalmente me pareció interesante escribir sobre éste tema ya que nunca me lo había puesto a analizar y es algo que va en contra a lo que siempre se nos recomendó. No estoy tratando de que dejes de consumir leche ni mucho menos (yo personalmente no dejé de hacerlo), solo quiero que éste articulo te motive a seguir investigando el tema, hablar con especialistas y sacar tus propias conclusiones.
El tiempo nos dirá quien tiene razón, si las nuevas tendencias o las viejas.

Rubén Rosenzweig

Fuentes:

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